El protagonista, los contenidos. El marketing, el cómo. El branding, el qué. La venta, la consecuencia directa del trabajo de marca. La propuesta de valor, ponerse en los zapatos del cliente. La estrategia, enamorar, conquistar al cliente. Ahora, el copy: corazón, honestidad, sentimientos, emociones, transparencia, RSC, osea, caminar por la senda de lo correcto para ser sostenible en el tiempo.
Para llegar a las emociones del cliente necesitas un 90% de investigación, y el resto de redacción, pero redacción publicitaria persuasiva, que tiene su técnica, que no vale con saber escribir, y ya. Y para escribir así, hay que conocer el negocio y el perfil de su público. O sabemos a la perfección sus carencias, frenos y debilidades, o no hay nada que hacer.
Si aprendes a vender sin convertirte en vendedor, si no en generador de necesidades, y practicas un mensaje consecuente con los valores de marca coincidentes con los de quien te escucha, todo sobre ruedas.
Y recuerda: la elección de compra siempre pasa por la emoción. El posicionamiento final ha de estar en el corazón del consumidor, y no en su mente.
Y sé auténtico. Que tu marca seas tú. Y para eso, es imprescindible que te la creas. Que hagas lo que eres, y no al contrario. Y cuando consigues todo esto, no vale con eso, ahora hay que contarlo. Y todo lo que eres lo hace. Así que, elige bien y cuida a tus empleados, porque son tú. Profesionaliza al máximo cada una de tus vías de comunicación, porque todo, absolutamente todo, importa. No desestimes a quién no te quiere comprar, porque en el NO está la venta. Simplemente, aprende de él.
Y una vez que te conoces y conoces a tu cliente, el primer paso para el cambio es la acción. Acciones positivas para tu marca, tu contexto y tus clientes. Y todo eso empieza por lo que escribes. Hazlo tal y como se expresan tus clientes, y vas a resonar con ellos.
Más allá de mi formación y conocimientos específicos, quienes me quieren en su comunicación, saben por qué yo soy singular, y especialmente buena en esto del copy. Saben que pongo en las palabras adecuadas lo que otros quieren contar, para convertirlo en ventas. Saben de mi empatía: ponerte en el lugar del otro sin invadirlo ni anularlo. Y también de mi conocimiento emocional, racional, funcional y fisiológico sobre el ser humano.
La gestión, desarrollo y conocimiento de la empatía, es mi valor diferenciador, puesto que llevo casi veinte años acompañando emociones desde el coaching, traduciendo las emociones de otros para que puedan nombrarlas y avanzar por ellas, encontrando la solución, que siempre está en su interior. Y para hacer eso he necesitado conocer a fondo cómo funciona el ser humano, mente y cuerpo, como ambas cosas son una sola y van de la mano, y como si se disocian distorsionan la percepción y somatizan. Y en esos veinte años también me he dedicado a la comunicación audiovisual: radio y televisión.
Empatía, emoción, razón, fisiológica, palabras, nombrar, expresar, avanzar, mente, cuerpo, percepción, solución... Todo eso es copy... ¿Qué otra cosa podía ser yo, sino copywriter?
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